Indonesia, un hermoso archipiélago compuesto por unas 17.000 islas, se ubica a ambos lados del Ecuador terrestre, entre el sudeste asiático y Oceanía.
Tiene una superficie total de 2.027.087 kilómetros cuadrados y viven en alrededor de 237,5 millones de personas en unas 6.000 islas, con un promedio de 141 habitantes por cada km2.
Comparte fronteras terrestres con Malasia, Papúa Nueva Guinea y Timor. Su clima tropical, derivado de su cercanía con el Ecuador, le concede diversos paisajes típicamente tropicales, aderezados con un período de monzón y otro de lluvias, pero también sequías.
Estos cambios climatológicos se deben también a que Indonesia se encuentra en el centro de dos masas terrestres: la australiana y la asiática.
Igualmente, se presentan fuertes lluvias durante todo el año, especialmente entre diciembre y marzo, lo cual favorece el desarrollo de una densa masa vegetal.
Aunque desde Java central hacia el este, la estación seca es más intensa año tras año, de junio a octubre, tanto que en las islas Timor y Sumba no cae agua en esos meses.
El archipiélago de Indonesia ostenta una variada colección de especies florales, tantas que se han nombrado y clasificado unas 28.000 variedades distintas de especies florecientes.
Cabe destacar que esta tierra asiática es rica en plantas florales autóctonas, únicas, que no se consiguen en ninguna otra parte del planeta.
Y es que este territorio cuenta con alrededor de 17.000 islas, siendo Indonesia el quinto país con más biodiversidad del planeta, donde abundan variadas regiones de selvas tropicales hacia las tierras bajas del norte, pero también existen bellos bosques en las tierras bajas del sur, así como zonas de pantano y hermosas costas.
Hay de todo, para todos.
¿Por qué es un país con gran biodiversidad?
Los bosques de esta nación tropical cubren cerca del 60% del país. Por ejemplo, en la isla de Sumatra y Kalimantan predominan especies florales típicas de Asia, aunque lamentablemente bosques menos extensos ubicados en la isla de Java han sido arrasados por la mano del hombre.
De la misma manera, existen islas con vegetación endémica, que no se ve en ningún otro ligar del mundo. Estas son las islas Célebes, Maluku y Nusa Tenggara, que también cuenta con animales endémicos.
Su flora se origina como consecuencia de una mezcla exótica entre especies nativas asiáticas y oceánicas, toda vez que Indonesia se localiza entre dos continentes: Asia y Oceanía.
La diversidad floral es tan grande que existen alrededor de 40.000 especies florales, con 2.500 tipos distintos de orquídeas, pero también hay sorprendentes plantas carnívoras, 122 especies de bambú, y una impresionante variedad de 3.000 árboles de diferentes especies.
Otro récord grande es de las plantas medicinales, con 6000 especies diferentes. Se ubican en bosques tropicales de las tierras bajas y en las colinas.
Pero también la biodiversidad está dado por la existencia de distintos paisajes marinos, de ecosistemas, de manglares, arrecifes de coral, marismas, llanuras de mareas, campos de algas marinas, estuarios y dunas.
Pese a esta maravilla natural, esta nación asiática sufre los rigores de la contaminación a todo nivel, con una creciente destrucción de sus hábitats, derivada no solamente de una gran densidad poblacional amenazante, sino de un manejo indebido de residuos plásticos, de los recursos hídricos, caza furtiva entre otros males que han ocasionado, por ejemplo, que se hallen igualmente bajo extinción crítica según reportes de la Unión Internacional para la Conservación de la Naturaleza (UICN) unas 15 especies de mamíferos, de un total de 140 especies.
El Orangután de Sumatra puede desaparecer de la faz de la Tierra, en cualquier momento, de seguir las cosas así en Indonesia.
¿Cuáles son las especies de flores más bonitas de Indonesia?
En Indonesia, tal y como hemos comentado, se puede disfrutar de una flora extraordinaria. Es un país lleno de flores bonitas y variadas.
La flor oficial es el Jazmín de arabia, o Jasminum Sambac, una planta perenne que suele alcanzar unos 3 metros de altura, con tallos largos y flexibles.
Dichos tallos se vuelven con el tiempo leñoso e invaden las plantas circundantes, enredándose en estas.
Y sus flores blancas miden unos 3 cm, disponiéndose en forma simple o doble, en racimos de 3 a 12 y en forma de cimas.
Tiene un aroma especial, envolvente, muy agradable y penetrante.
No es muy resistente al frío, apenas soporta hasta -3 °C, porque justamente es una especie nativa de una región tropical. Florece en verano, entre junio a octubre y hasta noviembre.
Y en invernadero o en climas suaves es capaz de florecer todo el año.
Por eso se cultiva al aire libre solamente en la franja mediterránea, o en la costa atlántica, ya que necesita un clima más templado. El frío le tumba las hojas.
Es considerada una flor sagrada en la Indonesia tradicional. Simboliza la pureza, la simplicidad, el carácter sagrado y la sinceridad.
Tiene un lugar especial en eventos importantes, como las bodas de los indonesios en la isla de Java.
Los cabellos de la novia se adornan con hilo de guirnaldas de jazmín dispuestas como una red para adornar el moño.
Y guirnaldas de jazmín, hechas con capullos de flores que no se han reventado completamente, son usadas para adornar el ambiente nupcial. Son conocidas con el nombre de roncen melati.
Pero también son consideradas todo un emblema nacional en el archipiélago indonesio, la Anggrek Bulan y la Padma Raksasa Rafflesia.
La Anggrek Bulan, Melati putih o Phalaenopsis amabilis, es nativa del sureste asiático, desde donde se extiende a partir de Malasia, Papúa Nueva Guinea, hasta las Filipinas. También se ve en el norte de Australia.
En vida silvestre se consigue debajo del dosel forestal. Busca la humedad reinante en la parte baja, como toda buena orquídea.
Soporta temperaturas entre los 14 °C-35 °C, pero su ideal es vivir entre 20-24 °C.
Crece encima de troncos de árboles con mucho musgo, porque de esta manera extrae los nutrientes que necesita con ayuda de sus raíces, que se adhieren firmemente a la corteza del tronco del árbol que usa para su supervivencia.
La Padma Raksasa Rafflesia, o Flor Rara, es una espectacular planta parásita, muy llamativa, que vive en los bosques húmedos tropicales dl Indonesia.
Puede pesar hasta 11 kilogramos y muestra una enorme inflorescencia considerada de las más grandes del globo terráqueo, adornada con flores pequeñitas amarillas que contrastan con el fondo rojo.
Tiene entonces cinco pétalos muy carnosos, de alrededor un metro de diámetro, bien sea en color rojo intenso o anaranjado, con cinco grandes lóbulos o pétalos que configuran una sola flor y que solamente se abren unos 5 días, tras varios años de ausencia.
Al igual que toda especie de gran tamaño, no florecen sino cada 2-4, o más años.
El detallazo es que esta flor tienen un singular mecanismo de defensa: al abrirse despide un fuerte hedor a carne podrida que se hace insoportable, pero que logra su objetivo: atraer moscas carroñeras, los insectos que la polinizan. De esta forma tan especial logra multiplicarse.
Dicho olor lo consiguen porque saben mimetizar el calor y absorben el olor de un animal muerto, para su beneficio particular de multiplicación.
No tiene hojas ni tallos, por lo que es incapaz de realizar fotosíntesis. Por eso precisamente es una planta parásita, que vive encima de las raíces de un árbol, a fin de obtener los nutrientes necesarios.
Lamentablemente, se encuentra bajo amenaza de extinción, dada la enorme actividad de deforestación reinante en Sumatra, donde se la consigue.
Estas tres flores fueron seleccionadas en el año 1990, cuando se conmemoraba el 5 de junio como Día Mundial del Medio Ambiente, por iniciativa del presidente Suharto, pero ya desde tiempos remotos a la Jasminum Sambac se le rendían honores en los hogares indonesios.
Finalmente, cabe destacar que cada una de las 34 provincias que integran el territorio de Indonesia tiene su propio emblema floral.