Indonesia, un territorio vasto de 2.027.087 kilómetros cuadrados, situado entre el llamado sudeste asiático y Oceanía, ocupa el décimo sexto lugar en extensión del planeta, integrado por 17.508 islas, con unas 6.000 habitadas.
Es el cuarto país más poblado del orbe, con 270.204.000 millones de habitantes, según reportes de datosmacro.com, pero también se ha convertido en la mayor economía del sudeste asiático, lo cual la ha convertido en un foco de atención mundial.
Tiene una economía con grandes recursos naturales a su disposición, bajo un modelo político regido por la democracia que respeta una autonomía en las regiones.
En primer lugar, Indonesia posee una gran variedad de recursos pesqueros, pero también la naturaleza le ha regalado un potencial minero tremendo, con níquel, bauxita, cobre, oro y plata.
Pero también Indonesia cuenta con grandes yacimientos de petróleo, gas natural y carbón, así como caucho y estaño, a gran escala.
Asimismo, produce aceite de palma, arroz, maíz, caña de azúcar, coco, mandioca, banano, mango, ajíes, naranjas, piñas, batata, cebollas, repollo, patatas, tomates, soja, frijoles, papaya, café, cacao y aguacates, ocupando los primeros sitios de producción de toneladas a nivel mundial.
Destaca como producto de exportación el aceite de palma, con más de 38 millones de toneladas año, solamente en 2018.
Según la superficie cosechada, los principales rubros alimentarios que más produce Indonesia son el arroz, maíz, yuca, soja y maní, según reportes de la FAO, el programa Mundial de alimentos dependiente de la Organización de Naciones Unidas (ONU), que aún lo considera un importante productor agropecuario, que también lo ubica como uno de los más importantes productores y exportadores mundiales de cultivos arbóreos colmo caucho, copra, la almendra de palma, café, cacao y especias.
Se encuentra en un eje geográfico de estratégica importancia comercial, en el centro de una de las regiones más desarrolladas del planeta.
No pocos especialistas han dicho que la economía de Indonesia actualmente se sostiene más o menos estable frente a la crisis financiera global, gracias al motor del consumo interno, que ha venido impulsando su crecimiento económico en los últimos tiempos.
Inversiones locales crecientes, de propios y extranjeros, también han dado un impulso certero a la economía, que tras la peor parte de la pandemia del Coronavirus, ha comenzado a crecer nuevamente al cierre del año 2021.
Indicadores económicos en Indonesia & Desarrollo
Más allá de su localización ecuatorial, entre Asia y Oceanía, pero también cercano a la gran Australia, en los últimos años se han visto algunos avances en el crecimiento económico de Indonesia, derivado de políticas macroeconómicas con algunas iniciativas claves que han logrado alcanzar un crecimiento económico sostenido, aun en medio de las dificultades globales de tiempos recientes.
Por ejemplo, en el año 2020 Indonesia fue el 32º exportador más grande del planeta, con cerca de 167,4 mil millones de dólares, equivalentes a 0,9% del total mundial.
En bienes y servicios exportados, Indonesia logró una cifra de 200,1 mil millones, posicionándose en el lugar 29 a nivel internacional.
Igualmente, la economía se ha visto fortalecida porque ha aumentado la competitividad y un consumo interno, que en los últimos años ha alcanzado incrementos importantes, con índices superiores a un 60%, una contribución nada despreciable al Producto Interno Bruto (PIB) del país.
Y antes de que estallara la pandemia mundial del COVID-19, al cierre de 2018 Indonesia recibió 13,3 millones de turistas internacionales, con más de 14.1 mil millones de dólares ingresados solamente a la economía por ese concepto.
Ubicación del PIB indonesio a nivel mundial
Por volumen de PIB, es la economía número 15 a nivel mundial. Su deuda púbica en el año 2020 fue de 339.930 millones de euros, con una deuda estimada del 36, 62% del PIB.
En otras palabras, la deuda per cápita es de unos 1.258 euros por cada habitante.
Y la última tasa de variación anual del Índice de Precios al Consumidor, o IPC, fue en febrero de 2022, con un puntaje del 2,1%.
Además, es bueno saber que el PIB per cápita de Indonesia en el año 2021 alcanzó los 3.712 euros, lo que ubica a esta nación del sudeste asiático en el puesto 10 de la tabla mundial, lo cual aún coloca a sus habitantes en un nivel de vida muy bajo, con respecto a los 196 países que integran el ranking de PIB per cápita.
Con todo y todo, la economía de Indonesia logro expandirse 3,69% del Producto Interno Bruto (PIB) en el año 2021, según se informó a través de reportes oficiales emanados de su Banco Central, a pesar de la pandemia mundial del Coronavirus, a medida de que la gran mayoría de consumidores y empresas reanudaron sus actividades, regresaron a la vida normal.
Se produjo un repunte de la inversión que revierte la contracción del año anterior, ubicada en un 2,07 a consecuencia de la recesión mundial, con una disminución de las exportaciones y una caída importante del consumo.
De hecho, la economía pudo crecer 5.02 % en el cuarto trimestre de 2021. Y se pronostica que el PIN seguirá creciendo en 2022, muy a pesar de la persistencia del Coronavirus a través de sus variantes.
El Fondo Monetario Internacional ha dicho que en 2022, el crecimiento económico de este gigante del sudeste asiático no superará el 5,6%, aunque antes, en el informe anual anterior, dio un 5,9%, mientras que proyecta un 6% en 2023.
Expectativas de nuevos negocios en Indonesia
No obstante, hay proyecciones serias que indican que alrededor de 60 millones de trabajadores de bajos ingresos, lograrán ingresar, en un década más, a las filas de la clase media, por lo que seguirá aumentando la demanda de bienes internos y servicios.
Eso hace atractiva la posibilidad de hacer nuevos negocios en Indonesia, especialmente en el sector terciario o de servicios, porque actualmente ostentan también altos índices de confianza del consumidor, un indicador muy atractivo que impulsa la creación de nuevos empleos.
De hecho, igualmente se ha registrado un crecimiento nada despreciable de la llamada industria minorista, que va a la par del crecimiento sostenido de la clase media, que es la que en definitiva dinamiza la economía con sus aportes intelectuales y económico.
Han surgido entonces nuevos centros comerciales, supermercados y centros de consumo de todo tipo, especialmente en las ciudades importantes de Indonesia.
Solamente en Yakarta, por poner un ejemplo, existían a finales de 2016 casi 200 centros comerciales nuevos.
Otro dato interesante guarda relación con el comercio electrónico. Indonesia es una potencia en esta forma de hacer negocios, de alentar el consumo, porque son los cuartos usuarios más grandes de Facebook a nivel mundial, y se encuentran entre la tasa más alta de usuarios de Twitter, en toda la zona del Asia Pacífico, lo cual él da ventajas a cualquier emprendedor para crecer rápidamente, porque tendrá audiencias cautivas por miles.
A pesar de todo eso, el umbral de la pobreza arropa a unos 27,7 millones de personas. Y la brecha entre personas muy pobres y ricos cada vez se amplía más.
En todo caso, no hay que perder las perspectivas y analizar todas las variables, porque aunque el mercado de consumo es amplísimo, también es cierto que Indonesia ocupa actualmente el puesto 73 de 190 países integrantes del Doing Business, que los ubica según la facilidad que tienen para hacer negocios.